Cuidado Solar en Climas Fríos: No te Dejes Engañar por las Nubes
En este nuevo blog, hablaremos de un tema del que poco se habla: la importancia de la protección solar en climas fríos. Contrario a la creencia popular, los días fríos y nublados no son una exención automática para los dañinos rayos UV.
Por eso, hablaremos de los mitos y destacaremos la importancia vital de proteger tu piel durante tus vacaciones en climas fríos. Además, te ofreceremos consejos esenciales sobre la elección inteligente del SPF y cómo incorporar este paso fundamental en tu rutina diaria de cuidado de la piel sin sentir el peso de capas innecesarias. ¡Así que empecemos!
La Verdad sobre los Rayos UV en climas fríos
A medida que nos sumergimos en la realidad de los climas fríos, es crucial entender que la radiación ultravioleta (UV) no se toma vacaciones durante la temporada fría. Incluso en los días nublados y oscuros, los rayos UV continúan penetrando las nubes, alcanzando nuestra piel con su potencial dañino. Aproximadamente el 80% de los rayos UV pueden atravesar las nubes, lo que significa que tu piel está expuesta incluso en días grises.
De acuerdo al articulo de skincancer foundation:
“Los rayos UVB, son la principal causa de las quemaduras solares, y suelen ser más fuertes en el verano. Sin embargo, los rayos UVB pueden quemar y dañar la piel durante todo el año, especialmente en altitudes elevadas… Los rayos UVA se mantienen constantes durante todo el año y pueden penetrar a través de las nubes y la niebla. Los rayos UVA también pueden penetrar el vidrio, por lo que aún es posible dañar su piel mientras pasa un día de invierno brillante en el interior”
Desafiando Mitos: La Realidad del Daño Solar en climas fríos
Mientras que es común pensar que el invierno brinda un respiro para nuestra piel, la realidad es que el daño solar invernal puede ser tan perjudicial como en verano. La exposición continua a los rayos UV, aunque menos intensa, puede causar estragos a largo plazo, contribuyendo al envejecimiento prematuro y aumentando el riesgo de problemas cutáneos más graves.
Mito #1: El Frío Siempre Hidrata la Piel
Realidad: las bajas temperaturas y el viento pueden despojar a la piel de su humedad, contribuyendo a la sequedad y descamación. Es esencial mantener una rutina hidratante incluso en climas fríos.
Mito #2: No se Necesita Exfoliación en climas fríos
Realidad: la exfoliación ayuda a eliminar las células muertas y a prevenir la acumulación de piel seca. Adaptar la exfoliación a productos más suaves es clave para el cuidado invernal.
Mito #3: No se Pueden Obtener Quemaduras de Sol en Climas Fríos
Realidad: La combinación de altitudes elevadas puede aumentar la intensidad de los rayos UV, aumentando el riesgo de quemaduras solares.
Mito 4: Las Duchas Calientes son Buenas para la Piel en climas fríos
Realidad: Las duchas calientes pueden eliminar los aceites naturales de la piel, contribuyendo a la sequedad. Optar por duchas tibias y usar productos hidratantes después es más beneficioso.
Mito 5: Los Labios Agrietados son Inevitables en climas fríos
Realidad: La exposición al viento y al frío puede resecar los labios, pero usar bálsamos labiales y evitar lamer los labios puede prevenir la sequedad y las grietas.
Mito 6: El Cuidado Solar es Solo para días soleados
Realidad: La protección solar es esencial durante todo el año. Los rayos UV pueden causar daño incluso en días nublados y fríos.
¿Cuáles son los daños solares que produce el clima frío?
Sequedad Cutánea:El aire frío y seco puede provocar deshidratación en la piel, llevando a la sequedad, la descamación y la tirantez. Recuerda, que la piel seca es más propensa a irritaciones, comezón y enrojecimiento.
Agrietamiento de la Piel: Las bajas temperaturas pueden afectar la barrera cutánea, llevando a la pérdida de humedad y agrietamiento de la piel. Las grietas en la piel pueden volverse dolorosas, permitiendo la entrada de bacterias y aumentando el riesgo de infecciones.
Enrojecimiento e Irritación: El viento frío y las bajas temperaturas pueden provocar enrojecimiento e irritación en la piel. La irritación constante puede desencadenar condiciones como la dermatitis y empeorar problemas cutáneos preexistentes.
Pérdida de Elasticidad: El frío puede disminuir la producción de colágeno y elastina, contribuyendo a la pérdida de elasticidad de la piel. Por ello, la piel puede volverse más propensa a arrugas y líneas finas, mostrando signos prematuros de envejecimiento.
Agravamiento de Problemas Dermatológicos: Condiciones como la psoriasis y el eczema pueden empeorar en climas fríos debido a la falta de humedad. Puede hacer incremento en la picazón, el enrojecimiento y la descamación en áreas afectadas.
Quemaduras Solares: A pesar del frío, es posible experimentar quemaduras solares, especialmente en áreas expuestas como la cara y las manos.
Vasodilatación: El cambio brusco de temperaturas puede provocar vasodilatación, dilatando los vasos sanguíneos y causando enrojecimiento. Este enrojecimiento temporal puede ser incómodo y contribuir a la sensación de piel sensible.
Descamación y Aspereza: La falta de humedad puede llevar a la formación de escamas en la piel, especialmente en áreas expuestas como las manos y la cara. La textura áspera y descamada puede afectar la apariencia y la sensación de la piel.
Otros daños que puede presentar tu piel:
- Piel deshidratada y áspera debido a la pérdida de humedad.
- Incremento de líneas finas y arrugas causadas por la exposición repetida a los rayos UV.
- Aparición de manchas oscuras y pigmentación irregular.
¿Sabes cuál es el SPF ideal de tu protector solar para climas fríos? Te lo contamos
Lo primero que debes hacer es identificar tu tipo de piel, pues, la piel Sensible, Seca, Grasa o Mixta pueden requerir diferentes formulaciones de SPF. Por ejemplo, las personas con piel seca pueden preferir texturas más hidratantes, mientras que las pieles grasas pueden optar por fórmulas más ligeras y oil-free.
Lo segundo, Elige un protector solar con SPF Amplio , preferiblemente que sea de SPF 30 o Más. La Academia Americana de Dermatología recomienda al menos SPF 30 para uso diario. Este nivel proporciona una protección del 97% contra los rayos UVB. Para una exposición prolongada, especialmente en climas fríos y soleados, considera SPF 50 o superior.
Adicional a ello, busca un protector solar te proteja tanto de los rayos UVA como de los rayos UVB: Busca en la etiqueta la mención de "amplio espectro"
Tip adicional, considera Ingredientes Adicionales:
Antioxidantes e Hidratantes: Algunos protectores solares incluyen ingredientes antioxidantes y humectantes que pueden ser beneficiosos en climas fríos. Busca productos que no solo protejan, sino que también hidraten y nutran la piel.
En resumen, la protección solar en invierno es una necesidad, no un lujo opcional. Al elegir sabiamente tu protector solar y adoptar una rutina coherente, no solo proteges tu piel de los daños, sino que también aseguras un resplandor saludable durante toda la temporada invernal.
En Belle Farma conoce las opciones ideales para que cuides de tu piel durante vacaciones