¿Recuerdas nuestro blog sobre la tendencia Skin Care Effect que reinará este 2020?, pues bueno, “El cuidado de la piel es el futuro del maquillaje” y es que la base de la belleza es una piel sana y cuidada. Dejamos atrás esas capas de maquillaje que sólo camuflaban nuestra piel y damos paso a una piel sana en la que utilizamos el maquillaje sólo para resaltar nuestros mejores rasgos.

Probablemente hayas escuchado hablar de esa famosa rutina coreana que consta de 10 pasos, pero seamos sinceras, muy pocas tenemos el tiempo de realizar una rutina con tal cantidad de pasos. Por eso, hoy en Belle Farma te proponemos una rutina de 4 pasos que se convertirán en el ritual perfecto para tu piel ¡Empezamos!

| Reserva un tiempo para limpiar y desmaquillar tu piel! 

La base de una piel saludable es la limpieza, pues lo más importante es eliminar la contaminación, el exceso de sebo, las impurezas y por supuesto el maquillaje. En cuanto a las texturas (aceite, leche, gel, espuma…) Elige la que se adecúe mejor a tu tipo de piel.

¡Nuestros consejos!

• En la mañana y en la noche limpia tu piel con un producto gentil como el agua micelar, o con un gel o espuma limpiadora
• En la noche, puedes realizar una doble limpieza: 1) Retira el maquillaje con un desmaquillante bifásico, leche limpiadora o agua micelar. 2) A continuación puedes lavar tu rostro con un gel o espuma limpiadora, si tu piel es muy sensible, el agua termal te irá de maravilla.
• Exfolia una vez a la semana para eliminar las células muertas y estimular la regeneración celular. Puedes utilizar uno químico (con ácidos AHA o ácidos BHA) o uno mecánico. Ojo, si tu piel es sensible prescinde de este paso.

| Trata y estimula tu piel

Una vez tu piel este limpia, puedes pasar al tratamiento que actuarán sobre una necesidad específica (antiedad, efecto lifting, hidratante, antioxidante, anti manchas…). Los serums contienen una alta concentración de principios activos que, gracias a su tecnología, penetran en las capas más profundas de la piel y son excelentes si deseas enfatizar el cuidado sobre una necesidad específica.

¡Nuestros consejos!

• Siempre debes aplicar el serum antes de la hidratante, sobre la piel limpia y seca.
• Si tu piel es joven, mixta o grasa, el uso del serum por si solo en la noche sería más que suficiente. Pero si tu piel es madura o seca, es inevitable el uso de crema para retener el agua en tu piel
• Agrega un serum antioxidante en la mañana para combatir el efecto de los radicales libres y proteger tu piel.

 | Hidrata tu piel

Cuando tu serum se haya absorbido totalmente aplica tu crema hidratante. La hidratación es un paso fundamental en nuestra rutina, pues ayudará a conservar el nivel óptimo de agua en nuestra piel, esto ayudará a que esté más elástica y que cumpla su barrera protectora.  

Adicional, agrega un contorno de ojos, pues esta zona es muy delicada y frágil, por lo cuál necesitas un producto especial. Aplica una pequeña cantidad (como el gran de un arroz) en tu dedo anular y aplícalo alrededor del ojo dando ligeros toquecitos, sin arrastrar el producto.

¡Nuestro consejo!

• Elige una hidratante de acuerdo a tu edad y tus necesidades. La textura también debe corresponder a tu tipo de piel.
• Aplica tu crema de adentro hacia afuera en sentido ascendente para activar la circulación
• No olvides aplicarla también en el cuello y el escote.

 | Finaliza tu rutina con un fotoprotector

No importa si afuera está haciendo frio, o si sales de la casa directo a la oficina, tu rutina si o si debe finalizar con fotoprotección. Muchas veces olvidamos este paso, pero no tenemos en cuenta que los rayos UV siempre están presente, incluso en días nublados. El protector solar es nuestra primera crema antiedad, el primer paso para prevenir el fotoenvejecimiento de la piel, que es causante de cerca del 80% del envejecimiento de la piel (el otro 20% es causado por la edad)

¡Nuestro consejo!

• Elige un fotoprotector con al menos un SPF de 30, aplícalo 30 minutos antes de la exposición al sol y no olvides reaplicarlo cada 3 horas.
• Revisa que sea un protector de amplio espectro, es decir, que te proteja de los rayos UVB (responsables de los daños inmediatos sobre la piel, como las quemaduras), rayos UVA (daños en el DNA de la piel, las células, los vasos y los tejidos) y rayos IR-A.
• Si te maquillas puedes elegir un fotoprotector en polvo o en bruma, son ideales para reaplicar tu protección solar sin estropear tu maquillaje

Recuerda esta regla “El orden de los productos se debe aplicar del más ligero al más denso” y también que este ritual dependerá siempre de tus necesidades y prioridades, posiblemente sólo tengas una rutina de cuatro pasos, o seas tan apasionada y elijas una más extensa. Sea cual sea tu elección, nunca olvides limpiar, hidratar y proteger tu piel.